Especial del Día de los Inocentes
Debido al inminente fin del mundo y ante tantas versiones posibles, la mayor parte de la población no sabe cómo prepararse o qué medidas tomar. Existen dos errores fundamentales: o bien no se preparan del todo o se preparan de más en los puntos equivocados. La clave, según los nuevos Coaches Expertos en el Fin del Mundo, consiste en prepararnos para todos los escenarios posibles.
Cuáles son los símbolos del fin del mundo
Por si aún no crees que el mundo no se va a acabar, los símbolos no pueden ser más claros:
- Que cualquier cosa que tenga que ver con Twitter siga siendo noticia.
- La existencia de más y más NiNis y Social Marketing Profesionals listos a compartir en sus perfiles las fotos de los tsunamis que destruirán la Tierra.
- La proliferación de géneros musicales como el reggaetón.
Estos son los posibles escenarios donde debemos prepararnos de acuerdo con los coaches de fin del mundo.
- Destrucción total del planeta
- Destrucción parcial del planeta
- Cambio espiritual
- Invasión extraterrestre violenta
- Epidemias y zombies.
- Ningún cambio (peor escenario)
Destrucción total del planeta
Esta destrucción sería causada por cataclismos naturales como puede ser una explosión del Sol, la erupción del un volcán cien veces más poderoso que el Krakatoa ubicado debajo de los pedregales de Tatatila, Veracruz, o un meteorito gigantesco que caería de nuevo en Yucatán. Para esta alternativa, lo que se recomienda es aprender, pero ya, un método para convertirnos en materia intangible o espíritu y poder viajar a otros planos existenciales.
La destrucción parcial de la tierra
Los expertos predicen una posible elevación del nivel de las aguas, una disminución del nivel de las tierras o una combinación de las anteriores. Para esto se recomienda aprender cosas básicas como cocinar, leer libros, obedecer a los padres, pero sobre todo, volvernos expertos en la crianza de cerdos y en aprovechamiento de sus derivados. Los cerdos son animales resistentes, graciosos, fáciles de alimentar y poco exigentes. El consejo es que adquiramos 2 parejas de cerdos y en cuanto detectemos el inicio de los cataclismos irnos a vivir a montañas altas no volcánicas.
Un cambio espiritual
Alguos maestros y chamanes ascendidos predicen que el cambio se dará sólo en nuestros espíritus. De repente, dejaremos de ver la paja en el ojo ajeno y le encontraremos sentido a seres como los zetas, los coaches de vida, los ninis y los social media marketing professionals, nos concentraremos en su lado positivo y bello, estaremos presentes en el aquí y el ahora. Sin embargo, existe un gran riesgo en que el mundo se convierta en un lugar de luz. Los chamanes como Sri Sri Meau Ikahulea Re Ami Kuazar Demi Beyondananda, advierten que este exceso de bienestar y paz traería como consecuencia un desbalanceo de loo chacras. La belleza y la luz irradiada no tendrían un contrapeso y el planeta perecería de iluminación. Para ello la recomendación es encontrar nuevos pecados de buen gusto que compensen tanta luz irradiada.
Una invasión extraterrestre violenta
Ya sea que los extraterrestres sean malvados o que vengan en son de paz, cuando vean lo que hemos hecho con el mundo sin duda se molestarán sobremandera y decidirán diezmarnos. Lo recomendable en cualquiera de los dos casos es tratar de hacer amistad con alguno de ellos para conocer exactamente qué es lo que les interesa de nuestro planeta, y de ahí desplazarnos hacia los lugares que no les interesan (que muy probablemente serán Oaxaca, Chiapas o Centroamérica).
Epidemas, gérmenes y zombies
Aquí sí que estaríamos en problemas, pues con los gérmenes y zombies es muy difícil establecer amistad o entrar en razón. Además, los microbios son pequeños y poco manejables, y los zombies son como usuarios de Twitter. No hay recomendación ni salvación posible para este caso.
Que no haya ningún cambio
El peor escenario posible de acuerdo con los gurús y chamanes es que no se destruya la Tierra y todo siga igual. Esto tendría la terrible consecuencia de que tendríamos que seguirnos esforzando día con día en cumplir las metas que nos hemos propuestom, cumplir con nuestro trabajo y con nuestros clientes, levantarnos temprano, hacer ejercicio, comer bien, tratar bien a la gente, soportar a nuestros familiares y enfocarnos en objetivos y resultador reales. Sin duda un escenario desalentador, pero con mucho el más probable.